Al conducir por la calle Wolska justo al anochecer, nos llama la atención la iluminación del rascacielos. La sencilla pero interesante iluminación de la fachada discurre en diagonal desde la base hasta el tejado del edificio. La sensación vanguardista la diseña el interior del edificio, concretamente su recepción, donde se instaló una iluminación arquitectónica compuesta por luminarias Artshape SQ en tres formatos. La iluminación del patio no es menos espectacular y evocadora. Ésta, al igual que la fachada del edificio, se creó a base de luminarias Kubik LED en sus versiones con distintas distribuciones de luz: de una, dos y cuatro caras.